Aprendamos de la naturaleza

Cada mañana el milagro de la salida del sol nos saluda y lo tomamos con tanta naturalidad que ni siquiera lo apreciamos, a veces sólo nos detenemos en pensar en las obligaciones o responsabilidades que nos depara el nuevo día, y entonces sólo vemos la salida del sol simplemente como el instante del día que nos indica una hora al amanecer. ¿Cuántas veces te ha pasado de no tener ganas de levantarte? Sin embargo el sol imperturbablemente aparece todos los días, aún aquellos que no lo puedes ver, como sucede un día nublado o cerrado por nubes negras cuando llueve. Del mismo modo, cada noche la luna está allí colgada en la penumbra nocturna, pequeña a veces otras plena, iluminando el paisaje con la fragancia de un beso de una amada entrañable. He podido apreciar como en terrenos baldíos, la naturaleza se manifiesta silente y sale pasto o flores silvestres que tan sólo han sido regadas por las lluvias caídas en el año. Cada invierno contemplo los árboles desnudos, gráciles y plenos por tan sólo ser, árboles desnudos sin más, sin que traten de aparentar nada más. Ojalá nos pudiéramos desnudar con tanta naturalidad y atrevernos a mostrarnos así al mundo vivirnos cada año un otoño sincero, despojarnos de las hojas falsas y que no nos permiten crecer como seres especiales. Si aunque a veces me es difícil de aceptar, sé en el fondo que cada ser humano es un ser especial, pues fue creado por la materia mágica del cosmos que es la misma que nace en cada ser vivo en éste paraíso terrenal. Despertemos de una vez, y amemos con dignidad a la tierra, a las vertientes, a la naturaleza, y todo lo hermoso que nos rodea...cuida una planta en tu casa, sino tienes jardín, adquiere una mascota y desvivete por cuidarla y protegerla, dale todo el amor que puedas, que serán migajas con lo que te será devuelto y sobre todas las cosas, toma la decisión de ser feliz, así de simple, siéntelo en tu corazón como único propósito y déjale al cosmos el resto, te lo digo desde el fondo de mi corazón que está pleno y lleno de amor. Un abrazo cósmico, lleno de esperanza para una vida plena.

Una nueva sensación

Después de un sueño hermoso que tuve hace unos días atrás, mi espíritu se siente luminoso, renovado y vivo como quien dice en otra dimensión. Día a día, me siento acompañado de maestros espirituales que parecieran estar tomándome examen constantemente, es como si quisieran recordarme a cada instante que viva el ahora...en las mañanas cuando voy a mi trabajo cierro los ojos entremedio de la gente y siento el movimiento del bus, la velocidad, el ruido del motor, la música que suena o la conversación entre los pasajeros, y sin cuestionar nada, me veo desde lo alto y entonces me nacen unas ganas enorme de agradecer de estar vivo, y pienso en mi madre, o en mis hijos, o mis hermanos y me lleno de gratitud por todo el amor que recibo y me renuevo cada segundo. Después del sueño, es como si me ser se hubiese hecho trizas en mil pedazos y hubiese quedado una pequeña figura que de las cenizas se está rearmando, con una capacidad enorme de amar, de querer cultivar con ahínco la paciencia, donde la paz espiritual es el oxigeno de mi nuevo corazón y todo mi ser vibra de un modo armónico como nunca lo había hecho antes, y puedo ver y escuchar cosas maravillosas que de pronto no se expresar. La meditación se me hace necesaria de un modo casi imperioso, y tan pronto cierro los ojos puedo dejar mi mente en blanco, sin esfuerzo, del mismo modo que respiro o tomo un vaso de agua. Es por eso que siento las ganas de escribir, y contagiarte con mi paz deseando que nazca en tí una nueva armonía, una vibración distinta que te lleve a disfrutar de la vida en plenitud, con el convencimiento de lo que eres por si mismo, que por todo lo que posees o haz conseguido. Un abrazo cósmico,

La Tigresa y el hombre

  Se internó en la caverna del cerro buscando refugio, sin sospechar lo que le traería el destino. Llevaba dos días sin comer, el agua de la...